EN LA CALLE PIAZZOLLA [2] |
«Por dónde empezar», te escribió una vez alguien en una carta. A menudo está cerca: un animal tirado en el camino (el armadillo que cruzó sin mirar), un paisaje, un zorro en el techo del cobertizo, un gorrión en el seto, una casa deshabitada en el linde del bosque – una ráfaga de lluvia que azota los plátanos.
Tal vez una liebre acribillada sumariamente a perdigonazos por un cazador dormido.
O como aquí, Pegados uno a otro, los ojos entornados, una pareja bailando tango en la esquina de una calle nocturna. El bar mal iluminado, sillas de plástico en un andén vacío. Él, la cara surcada, serio, de sombrero y chaqueta vieja, un pañuelo de seda al cuello. Ella, una beldad devastada en una falda ajustada con raja, que con la pierna acaba de ejecutar con finura un firulete como al pasar, al ralentí: Brutal e íntimo este baile un poema que con despreocupada maestría deja todo tras de sí.
HC ten Berge (título original: In de Piazzollastraat [2]) © Traducción española: Diego J. Puls 2006 |