ESCUCHA... |
escucha: cuando todavía vivía con él y juntos construíamos el mundo, tejiendo y deshilachando cuando tenía junto a mí su ojo y sus manos blancas entonces bendije la nieve y reí bajo la lluvia.
cuando pasaba las tardes en su habitación y me paseaba en su cuerpo o me sentaba, leía un libro o dormía, cuando conocía el camino de su oído y navegaba por el río de sus ojos cuando jugaba con sus manos y deambulaba por sus labios a menudo me topé conmigo mismo, riendo y llorando o diciendo cosas. pero, al llegar el otoño él se fue y ahora yo mismo ya no soy porque me fui con él mis manos estrecharon sus manos quedé prisionero de sus ojos quedé enredado en sus oídos quedé perdido en su cuerpo ahogado en su cuerpo.
Hans Lodeizen (extraído de: Het innerlijk behang en andere gedichten [El empapelado interior y otros poemas], 1952) © Traducción española: Diego J. Puls (en colaboración con Carmen Bartolomé Corrochano), publicada en «Poesía contemporánea en lengua neerlandesa», Stichting Ons Erfdeel, Rekkem (Bélgica), 1993. |