Menu Content/Inhalt
EL SAMARITANO EMPEDERNIDO

 

 

Adivinen lo que me pasó...

Estaba yo durmiendo la resaca

el otro día tirado a la vera del

camino y en eso viene y me

despierta un tarado subido

a un caballo y me dice tienes frío

Le digo por qué no te mueres

qué frío ni qué frío imbécil

hazme el favor y métete en tu

panteón familiar pero el

tremendo papanatas no me había

entendido porque de repente

agarra y se rasga en dos la capa

¡y quiere darme la mitad...!

Yo voy y le digo muérete y

métete la media capa donde tú

ya sabes payaso y déjame en paz

de una buena vez pero el tipo

realmente tiene vendados los

ojos porque en vez de hacerse

humo empieza a agitar una botella

de aguardiente o al menos eso

es lo que yo pensé porque me tomo

un trago ¡y resulta que es agua!

Lo juro me cago en la leche

Le digo por qué no le llevas

el agua a tu puta perra y vas

a tomarle el pelo a la cuca

de tu madre pero el muy

desgraciado se hace el

desentendido ¡y saca a relucir

un arenque y una barra de pan!

Le digo pedazo de babieca

que se te atore el corazón

y pásate el arenque por la

entrepierna especie de idiota

y se me revuelve el estómago

como no me había pasado nunca

y le suelto todo el vómito encima

¿y saben qué hace? ¡se queda

ahí parado como un pasmarote!

Y se pone a fastidiar sobre si

tengo techo porque en caso

de que no lo tenga puede ofre-

cerme su cama de huéspedes

Le digo vete a hacer la caja

con tu cama de huéspedes

maricón de mierda que si no

te hago volar la cabeza pedazo

de rosquete pero al tipo no lo

para nadie y se pone a tirar de mí

ya saben intenta levantarme

de ahí o sea que agarro un

cascote y se lo revoleo a la

cabeza y ¡PAF! le da en medio

de la jeta ¡PUM! y veo que el

coco se le parte en dos y que

se va contra el suelo de una como

una bolsa de cemento ¡PUMBA!

Ahí yo puse pies en polvorosa con

el jamelgo que todavía pude ven-

der a buen precio en el matadero

pero lo que quiero decir es que

hoy por hoy uno ya no puede

fiarse con toda esa chusma

que anda suelta por ahí...

 

 

 

Jules Deelder (título original: De hardnekkige Samaritaan; extraído de Bijbelsch [Bíblico], editorial De Bezige Bij, Ámsterdam, 1999)

© Traducción española: Diego J. Puls, para el XX Festival Internacional de Poesía de Medellín (Colombia), 2010; revisada en 2016