Versión libre, con formato de tango. Cantarla con la música de “Mano a mano”
Soledad
Como un perro me has dejado, solo y triste en un calvario
Pero ya te he perdonado porque sé que andas por ahí
Esta noche mientras iba pensativo por el barrio
Vi la sombra de tu talle en la ventana de un baño
De un caserón de bacanes de la calle Paraguay.
Y ayer mientras vagaba por los bosques de Palermo
El cascabel de tu risa por sorpresa me asaltó
Lo sabía, mi percanta, es una fija que tengo,
Nadie me quita del mate lo que es certeza en mi pecho,
Que no importa donde vayas, siempre estás donde estoy yo.
Hace días me pasaste en un Ford-T ostentoso
Con tus amigas y un guapo que reía como un gil
Y aunque vos no me miraste como lo hicieron los otros
Yo sé que la única fuiste que me junaste a tu modo
Y que sos la única mina que no ha de vivir sin mí.
Una sonrisa me brota y pone luz a mis labios
Lo sabía mi papusa que no me ibas a largar
Capaz que vuelvas mañana, capaz que vuelvas pasado,
O tal vez no vuelvas nunca a refugiarte a mi lado
Pero pase lo que pase nunca me podrás dejar.