Menu Content/Inhalt
ME PONGO MI ESPECIE

 

1

 

Nací de un punto una mañana a las nueve

la primera mañana imaginable porque no emanaba

de la noche, cambió del fucsia estridente al amarillo azufre

todavía me acuerdo.

 

El punto justo, con la nitidez y el volumen justos

puesto por alguien empuñando un 9H, breve clavada

la llamaban Dios menos yo.

 

Un horrendo primero, pero de una vez por todas dejé

de ser nadie.

 

2

 

Llevaba una camisa de bebé que también sería mortaja

no puede ser, igual es cierto.

No lejos de aquí volví a ser un punto, el único

 

si bien más débil, puesto quizá con un 6B por ese mismo

alguien, me encorchó de nuevo en mí, de momento las

perfumadas prendas de algodón en mi armario.

 

3

 

Creí que las cosas ocurrían a la par.

Puede ser la especie que debía ponerme, puede ser el movimiento

puede ser la alegría o la locura o ambas, verbena en el infierno.

 

Creí que debía nevar, pensar en el transcurso

y yo convertida en mi propia señal de ajuste

traicioneramente igual como la de cualquiera.

 

4

 

Ya enseguida supe vivir muy bien, prediciendo lo que vendría.

Cuando llegó el amor ni siquiera con aspecto

de un ángel joven olvidé mi punto y me incendié, amarillo

un corazón fucsia.

 

Sin embargo olvidé olvidar, desnuda como una rosa simple.

 

5

 

Luego me quité la especie para ver si estaba vacía

para ver si me atrevía, la exanimación me atreví.

 

Los otros observaban cómo estaba, que no quedaba

nada de mí, ¿debía quedar algo de mí o algo?

 

6

 

Igual enseguida viví menos bien, no hay que quitarse

lo que cuesta ponerse, vuelta al molde estaba fuera de forma.

 

 

 

Sasja Janssen (título original: Ik trek mijn species aan; extraído del poemario homónimo, editorial Querido, Ámsterdam, 2014)

© traducción española: Diego Puls 2013 (versión revisada en 2014 con ocasión de la XVIII Feria del Libro de Guadalajara, México)