N.N. |
Todos las conocen: las ventanas grises que como ojos opacos cuelgan en los frentes los párpados cerrados, las vendas cansadas tras las que residen personas invisibles.
Todos las conocen: las personas invisibles tumbadas en sofás y camas, tras puertas que no llevan nombre, todos las conocen, las puertas, las ventanas, no a las personas.
F. Starik, 2005 © traducción española: Diego J. Puls 2013, por encargo de la fundación LIRA |