ANOCHE ME ENCONTRÉ CON MIS PROGENITORES |
Anoche me encontré con mis progenitores, dos pálidas sombras inclinadas en la blanca luz de una farola.
A juzgar por su felicidad yo aún no podía haber nacido. Eran jóvenes y estaban muy enamorados. Una gran tristeza me invadió pues sabía cómo continuaría.
Ella soltó la carcajada por algo que él le susurró. Él se rio con ganas como todavía suele hacer. Intercambiamos un saludo muy cortés y otra vez se separaron nuestros caminos.
«Ya verán», alcancé a gritarles todavía, que algún día nos volveremos a encontrar. Abrazados y en silencio dieron vuelta a una esquina.
Hagar Peeters (título original: Vannacht kwam ik mijn ouders tegen; extraído de Koffers zeelucht [Maletas de aire marino], editorial De Bezige Bij, Ámsterdam, 2003) © traducción española para Chile: Diego J. Puls (con motivo del Día de la Poesía, 21 de marzo de 2015, Cementerio Católico Santiago de Chile) |