CUENCO |
para Hodei
Por ningún lado no existe, nunca. Solo que aquí y ahora se parece como dos gotas de agua a quién sabe dónde. Las calles se llenan, semejan no tener fondo. Es posible, para ello basta un solo hombre.
Ese hombre falta. En esta ciudad de todos, este universo de —dios mío— acaso nadie. Tan poco de lo que podría suceder sucede, escribió alguna vez un pintor.
¿Cómo hacer? ¿Cómo respirar del mismo aire del que una madrugada sacaron también a un ser querido? Saquearon. Acosaron.
Tal vez suceda mucho más de lo que es posible. Tal vez algún día el tiempo con sus manos forme un cuenco en el que quepa todo.
Stijn Vranken, agosto de 2014 (título original: Kom) © traducción española para Flandes: Diego Puls (con ocasión de un acto de homenaje a Hodei Egiluz, desaparecido en Amberes el 19/10/2013) |