ANIMALES PEQUEÑOS |
Alguna vez él no sabía aún de quienes abrirían fuego sobre él
para acallar el incendio en sus cabezas. Bah, las heridas de bala
no son más que los ojitos de los animales albinos bajo la piel, chsss
pliega tus manos en la espalda lo único que precisas es hacer que todo gire:
un pueblo se enrolla, chsss
que tus párpados sean cortinas que esconden soldaditos que retumban.
Ellen Deckwitz (título original: Kleine dieren) © traducción española: Diego J. Puls 2018 (con ocasión del XIII Festival Internacional de Poesía de Buenos Aires) |